Si en las televisiones no dan fútbol es más difícil olvidar que dan tertulias y crónicas rosas en otro horario.
Leer es sano. Algunas alternativas son el yoga o la meditación. Yo quiero vivir sin amo, sea él Dios o no. Así que tesino que es mejor evitar practicar sexo deportivo (diferentes modalidades de fornicación con sugestión de que te agrada), doparse o drogarse, o comer compulsivamente. También podemos dedicarnos a perfeccionar la higiene del hogar o personal, a tesinar sobre política (mi favorita), jugar a que jugamos mientras intentamos roncar.
El cine es una válvula de escape de estrés que es difícil de dominar: ahí que contemplar, como si miramos la virgen de Monserrat, 38" de pixels durante mínimo 1 hora. Lo que parece un deporte más idiota que hacer cine X se puede llevar bien por televisión: con mucha suerte de encontrar algo que te guste con el cine americano dado su gran volumen de metrajes, mirándolo como a un maki al cine francés y con más suerte que lo anterior si hablamos de encontrar cine de otros países. El cine español está en España segregado hasta en la televisión pública que no pone anuncios pero paga copyright y programa telefilms americanos en lugar de dar cine de su industria. Igual en TV3 con el cine en catalán. Pero aun así se pueden ver en la tele ambos y quedar contento.
A mis propuestas de leer, jugar, internet en general, tesinar, meditar, yoga o ajedrez que se pueden hacer solo o mejor acompañado. Añado, en el terreno de la política futurista, colocar electrodos en el cerebro de nuestros gobernantes para conectados a un dispositivo de rehabilitación del vigor por electroestimulación poder electrocutar ideas impropias de ellos de manera cuántica como las procedentes del acoso producido por tejidos sociales criminales: las organizaciones de cárteles paramilitares narcos, la cosa nostra, la asociación de empresarios de locales de alterne o el top manta. También algunas que ellos creen suyas, en Artur Mas: salud mala o en José Luis Rodriguez Zapatero: estatuto de autonomía independentista.
Tesino definitivamente que el Rey pague el I.R.P.F., las televisones públicas no paguen copyright y yo me trato con medicamentos. Todo esto servirá para la liberación si la sociedad psicoanaliza a los políticos porque si no aún que me trate no lo podré disfrutar porque solo nos salvará el cine y el Papa de tener amo.
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